sábado, 20 de febrero de 2010

Método científicamente probado para ligar en EH


En EH, porque allende el Ebro y el Adour (toma territorialidad) quizás no se necesiten tantas argucias para el sano ejercicio del ligoteo.


En el estudio de las emociones existe una controversia sobre si la emoción antecede a su manifestación fisiológica/expresiva o si sucede al revés, es decir, el clásico "estamos tristes porque lloramos" vs. "lloramos porque estamos tristes". Como casi todas las controversias psicológicas, ésta también se resolvió salomónicamente y parece que hay un poco de las dos cosas.


William James fue el más furibundo partidario del "estamos tristes porque lloramos" ó "tenemos miedo porque se nos acelera la tasa cardiaca", otros que llegaron después dijeron que no, que primero es la emoción y luego sus síntomas. Recientemente se ha demostrado que el hecho de detectar nuestros cambios fisiológicos o nuestra expresión puede acentuar una emoción cuanto menos, cuando no crearla directamente. Por eso tiene sentido la risoterapia o el hecho de que los actores pueden llegar a sentir realmente tristeza si ponen caras de tristeza.


Una de esas demostraciones se realizó con un original procedimiento experimental. Se exhibieron fotos de mujeres a un grupo de hombres a los que se colocó electrodos en el cuerpo. A la vez que veían esas fotos había un sonido de fondo que se asemejaba a unos latidos, de modo que los sujetos creían que era el sonido de sus latidos cardiacos. Se manipuló la velocidad de esos latidos, de modo que se aceleraban artificialmente ante la visión de algunas de las mujeres.


Luego se preguntó a los sujetos qué mujeres les habían parecido más atractivas, hubo una tendencia bastante clara de elegir, a semejanza de otras condiciones, como más atractivas a las mujeres cuya foto se expuso en el momento en que la cadencia de los latidos se aceleraba.


Se ha demostrado también que somos malos auto-perceptores de nuestro ritmo cardiaco salvo en casos extremos de taquicardias, por tanto la manipulación de ese sonido puede confundirnos perfectamente.


Por tanto, la idea es la siguiente: cuando estéis con ese/a chico/a que os hace tilín pero que se os resiste, le tomas de la mano y le dices "joe, te late mucho el corazón, míratelo" o directamente llevar una grabación de latidos acelerados que podéis hacer sonar en el momento adecuado. El/ella creerá que está excitado por la auto-percepción errónea de sus latidos y lo achacará a vuestra presencia. De nada.


Pd: la foto es de una manifa real que se celebró en Donostia, los beltzas estaban de acuerdo y no la disolvieron.